Escasez de agua | 6 formas de reducir el consumo de agua en la agricultura

La agricultura y la producción de alimentos representan alrededor del 70% del uso mundial de agua. Los climas son cada vez más variables e inciertos y, con una población en constante crecimiento, la disminución del nivel de agua tendrá efectos globales en la producción de alimentos. A continuación, te presentamos algunas innovaciones agrícolas que buscan minimizar el uso de agua.

¿QUÉ ES LA ESCASEZ DE AGUA?

La escasez de agua se define como la disponibilidad reducida de agua debido a la escasez física (por ejemplo, una sequía), la falta de infraestructura adecuada (como canales y pozos) o la falta de instituciones para garantizar un suministro regular de agua. En otras palabras, la escasez de agua se produce cuando los recursos hídricos son insuficientes para satisfacer las necesidades medias a largo plazo de una región.

¿A QUIÉN AFECTA LA ESCASEZ DE AGUA?

En la actualidad, la escasez de agua afecta a casi todos los continentes: alrededor de 4 mil millones de personas carecen de agua durante al menos un mes al año, aproximadamente la mitad de ellas en India y China. Y 500 millones de personas en el mundo se enfrentan a una grave escasez de agua durante todo el año.¹ La demanda de agua también está aumentando en la región mediterránea. En los alrededores del mar Mediterráneo, más de 180 millones de personas se ven afectadas por la pobreza hídrica y otros 60 millones sufren de estrés hídrico.²

TENSIÓN INCIERTA EN EL SUMINISTRO FUTURO DE AGUA

Además de la presión sobre los recursos hídricos del mundo, para alimentar al planeta que alcanzará los 9 mil millones de personas en 2050, será necesario un aumento en la producción agrícola de alrededor de un 50% y del 15% en las extracciones de agua. ³ A esto, hay que añadir que el incremento de la temperatura media asociada al cambio climático provocará una mayor incidencia e intensidad de fenómenos extremos, como sequías e inundaciones.

El mes de octubre de 2020 fue el más cálido registrado en Europa.⁴ Según un estudio del Centro Común de Investigación publicado en 2020, se estima que las regiones del sur de Europa serán las más afectadas por los efectos del calor extremo, la escasez de agua, la sequía, los incendios forestales y las pérdidas agrícolas resultantes.⁵ Dado que los países del sur de Europa son responsables de producir una gran parte del suministro de alimentos de Europa, estos efectos de las graves pérdidas de suministros agrícolas se sentirán ampliamente.

Si quieres conocer la huella hídrica de estos alimentos comunes haz clic aquí. 

6 SOLUCIONES PARA REDUCIR EL CONSUMO DE AGUA EN LA AGRICULTURA

Los científicos e investigadores de todo el mundo están trabajando para desarrollar soluciones inteligentes para reducir la escasez de agua. El Instituto Europeo de Innovación y Tecnología ha lanzado una iniciativa para encontrar soluciones a la escasez de agua, poniendo especial énfasis en el sur de Europa. A continuación, te mostramos seis soluciones inteligentes para reducir el uso de agua en la agricultura.

1. SISTEMAS DE RIEGO DE ALTA TECNOLOGÍA

Las soluciones innovadoras más recientes incorporan la digitalización en los sistemas agrícolas. Hoy en día, algunas empresas pueden capacitar a los agricultores para que tomen decisiones basadas en datos y reduzcan su consumo de agua hasta en un 30% gracias a los sensores de humedad del suelo.⁶ La empresa italiana Bluetentacles permite a los agricultores regar los campos solamente cuando es necesario, gracias al clima y a los datos de humedad del suelo. Un sistema similar también ha sido desarrollado por la startup española BioAgro, que ha creado una plataforma de riego inteligente utilizando tecnología de bajo coste basada en la información obtenida por sensores. Los sensores calibran la humedad del suelo y permiten el riego automático y la aplicación de fertilizantes solo cuando los cultivos lo necesitan. Estas plataformas también podrían pronosticar y alertar sobre las condiciones que pueden amenazar los cultivos, para que se tomen las medidas adecuadas de manera conveniente y oportuna.

2. SISTEMAS DE RIEGO POR GOTEO PARA REGIONES MÁS POBRES

En las regiones más pobres, algunas de las soluciones más económicas y prácticas para ahorrar agua son los sistemas de riego por goteo, que utilizan riego frecuente en cantidades pequeñas y específicas. Estos sistemas consisten en cavar tuberías bajo la tierra y abrir pequeños orificios en ellas cerca de las raíces de las plantas, lo que garantiza que se pierda una mínima cantidad de agua por evaporación. Estas tuberías conducen el agua con frecuencia a intervalos cortos para proporcionar agua a las plantas justo donde la necesitan.⁷ Según algunos estudios, los sistemas de riego por goteo se han utilizado con éxito en regiones áridas y semiáridas para la producción de hortalizas, cultivos y mantenimiento de árboles.⁸

3. ALMACENAMIENTO DE AGUA EN REGIONES SECAS

En las regiones más secas, es muy importante almacenar agua de forma inteligente. En Colombia, el Programa de Investigación de CGIAR (Grupo Consultivo sobre Investigación Agrícola Internacional) en Cambio Climático, Agricultura y Seguridad Alimentaria (CCAFS) se centra en la agricultura climáticamente inteligente (CSA) para ayudar a los pequeños agricultores a adaptarse y mitigar los efectos del cambio climático. Esto se logra recolectando el agua de la lluvia y ayudándoles a canalizarla de manera eficiente hacia los depósitos o tanques de almacenamiento para ser utilizada cuando el clima es más seco.⁹

Israel: una historia de éxito
Israel, con un 60% de territorio desértico, muestra que es posible una mejor gestión del agua a través de estos sistemas innovadores: el país ha revolucionado su sistema de reciclaje de agua para abastecer el 25% de su uso agrícola. En la actualidad, casi el 90% de sus aguas residuales se depuran con este fin, alrededor de cuatro veces más que en cualquier otro país del mundo.¹⁰

4. TRATAMIENTO DE AGUAS RESIDUALES

Para gestionar mejor las aguas residuales, la empresa italiana de Captive Systems ha desarrollado una tecnología que elimina los contaminantes de las aguas residuales mediante el uso de nanopartículas magnéticas con núcleo ferromagnético y un revestimiento externo. El sistema es capaz de eliminar selectivamente diferentes tipos de contaminantes de las aguas residuales, que van desde hidrocarburos y compuestos orgánicos hasta metales. Esto permite que las aguas residuales se reciclen y puedan reutilizarse para la agricultura.

5. ACUAPONÍA: COMBINACIÓN DE TÉCNICAS AGRÍCOLAS

La acuaponía proporciona una solución fascinante a la escasez de agua. Este sistema combina la acuicultura (la cría de peces) y la hidroponía (el cultivo de plantas en agua sin suelo). En algunas fincas o granjas integradas, estos sistemas pueden reducir el consumo de agua en un 90%, en comparación con la agricultura tradicional.¹¹

Aquí puedes leer más sobre cómo funciona la acuaponía. 

6. AGRICULTURA REGENERATIVA: UNA FÓRMULA PARA RECUPERAR EL SUELO

Para adaptarse al cambio climático y reducir a la vez las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), los investigadores, expertos y agricultores están explorando la 'agricultura regenerativa', una forma de producir cultivos que tiene como objetivo aumentar la biodiversidad, enriquecer los suelos, mejorar las cuencas hidrográficas y mejorar la salud del ganado y la vida silvestre. Al centrarse principalmente en la salud del suelo, en lugar de en las semillas que se plantan, la agricultura regenerativa promueve un sistema en el que la 'salud del suelo, las plantas, los animales y los seres humanos forman un todo y es indivisible”.¹² Esta visión más circular y holística de la producción ayuda a que los cultivos y los campos sean más resistentes durante condiciones estresantes, como por ejemplo las sequías.¹³

¿QUÉ PUEDES HACER PARA AHORRAR AGUA?

Si bien los agricultores utilizan las últimas tecnologías para evitar el desperdicio de agua, también podemos cambiar nuestros hábitos alimenticios para reducir parte de nuestra huella hídrica. Por ejemplo, podríamos reducir el consumo de carne (¡se necesita mucha agua para producir carne!) y escoger alimentos con una menor huella. Evitar el desperdicio de alimentos también ayudará a evitar el consumo excesivo de agua, por lo que una buena regla general podría ser comprar solo lo que realmente vamos a consumir. Finalmente, nuestras creencias y opiniones forman nuestro comportamiento, por lo que es útil recordar que cada gota de agua cuenta.

Aquí puedes leer un artículo sobre la huella hídrica de los alimentos que consumimos más a menudo. 

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